El narcotráfico ejecutó, el 2 de abril pasado, el primer atentado en el Perú contra el "empresario" Gerald Oropeza y sus acompañantes que habían llegado poco antes de México. ¿Porque es un narcoatentado? Porque los sicarios atacaron al Porsche con metralletas y granadas para acabar con todos los ocupantes, logrando quemar el auto de lujo con decenas de balas pero sin provocar costos sociales: todos sus ocupantes se salvaron; solo dos resultaron heridos.

El narcoatentado es un cambio muy importante en el accionar del narcotráfico: de motos lineales de las cuales bajaba uno o dos sicarios que disparaban a la cabeza y corazón de sus víctimas y, desde el 2008, en Armendáriz, Miraflores, empezaron a usar armas largas (AKM) para "ajustar cuentas" hasta el asesinato de Hugo Daniel Quintana Bardelli, el del lujoso su lujoso Lamborghini, en abril del 2014, han pasado al empleo de metralletas y granadas.

Si bien este atentado representa un hecho nuevo e inédito del narcotráfico y que volverá a ocurrir, sin embargo, eso no implica que las otras formas de "ajuste de cuentas" desaparezcan. Estas formas (la moto lineal, el estilo colombiano y el uso de armas largas (AKM) y camionetas, continuaran produciéndose. En este campo, se combinaran el "estilo" colombiano y la "mexicanización" para asesinar a aquellos que "cierran" un negocio de la droga.

Este atentado no fue obra de ningún cartel internacional. La conversación de Gerald "Tony Montana", con el italiano Zaza deja muy claro que no llegaron a ningún acuerdo "comercial" (envió de cocaína por el puerto del Callao). Ergo: Zaza no puede haber dado la orden para el atentado. Descartado. En consecuencia, quienes dieron la orden para el narcoatentado provino de otro clan o firma de la droga por -como se ha salido en los medios- una deuda. Las deudas en el mundo narco se paga con la muerte.

Por otro lado, y esto es lo más importante, la investigación policial y periodística del narcoatentado contra Gerald "Tony Montana" ha revelado varias cosas que vinculan a organismos del gobierno y al APRA. En primer lugar, los nexos de Gerald Oropeza con el Ministerio Publico, su empresa le da servicios de limpieza, así como la liberación de dos operadores que cayeron con droga y armas en manos de la policía. Eso demuestra la penetración del narcotráfico en este organismo encargado, precisamente, de perseguir el delito

De otro lado, la ocupación de una lujosa vivienda en la Planicie, La Molina, que le fue incautado a Crousillat, estando bajo jurisdicción del CONABI, ente adscrito a la PCM. Ante esta denuncia publica este ente, encargado de los bienes y propiedades incautados, la explicación de porqué Gerald Oropeza habita esa vivienda son risibles y deleznables. Debe investigarse profundamente quien permitió que viviera en dicha residencia. ¿Qué nivel gubernamental le apoyo?

En tercer lugar, la revelación de que Facundo Chinguel, quien cobro cupos por los indultos y conmutaciones a narcotraficantes de Alan García y sentenciado a 17 años de cárcel, fue abogado de la familia Oropeza-López y compro acciones de tres empresas de este clan familiar por 80 mil soles. Los vínculos con el APRA no se circunscriben a Facundo Chinguel, sino al extinto Américo Oropeza, padre de Gerald, quien fue militante aprista y candidato a la municipalidad de San Juan de Lurigancho.

Es más, según varios medios de comunicación escrita, señalan que también Gerald Oropeza es militante del APRA. Asimismo, su hermana Araceli Oropeza López y su madre, Pilar López de Oropeza. Estos datos, sin duda alguna, apuntan al APRA. ¿Y, Alan García? Hasta el momento, no existe información que lo vincule directamente con el clan "Oropeza". Pero, eso sí, afloran sospechas y rumores.

En conclusión, sorprende que el Ministerio Publico no se haya pronunciado sobre como una empresa de Gerald "Tony Montana" le de servicios de limpieza y que el presidente Ollanta Humala no se haya pronunciado sobre el narcoatentado ni como el "Tony Montana" peruano logro vivir en una lujosa mansión en la Molina o que Alan García, quien días antes dijo que le daba "asco" aquellos que se enriquecen con la política, no haya condenado los hallazgos que pueden vincular al APRA con el narcotráfico.

¿A qué se debe el silencio de Ollanta Humala y Alan García? Las razones son obvias. ¿Creen que rehuyendo el tema no le afectara políticamente? Están equivocados. Si les afecta. Ollanta Humala o el presidente del Consejo de Ministros tiene que dar una explicación porque un narcotraficante estaba en una casa de dos millones de soles. Y, Alan García debe –como lo hizo antes- decir que le da “asco” los vínculos de Facundo Chinguel con tres empresas de Gerald Oropeza y que el clan Oropeza sean militantes de su partido.